Disparar un arma es una acción que puede tener múltiples fines: desde probar puntería en una competencia con los amigos, cazar animales, hasta el terapéutico fin de liberar tensiones. No obstante, por sobre todo, las armas tienen el fin de la defensa. Pero para el correcto funcionamiento de un arma, ésta tiene que ser sometida a una mantención exhaustiva, minuciosa y periódica. (más…)