
Esforzarse por ser consecuente y coherente puede ser algo loable —claro, cuando existe una alta valoración en mantener un discurso— pero la verdad es que, después de todo, no debería costar ningún esfuerzo: ser fiel no es difícil cuando se está convencido. La columna “Libertarismo de principios contra la derecha nacionalista”, publicada por El Libertario refleja cierto temor libertario a las tentaciones que pueden presentarse en la jungla política, para no decir en el desierto. (más…)




